No se puede entrar en un tema tan general como el propuesto por el título del presente escrito, sin descender a la historia personal y lo que ha significado la HOAC (Hermandad Obrera de Acción Católica) para cada uno de sus actuales militantes y para mí en particular.
No se pueden olvidar los inicios de la HOAC porque en otro caso se pueden entender mal muchas cosas que han venido después. La HOAC, al revés de muchas instancias y organizaciones de la Iglesia católica española, no tiene fundador. A la HOAC, como movimiento especializado de la Acción Católica (AACC), la funda el ministerio pastoral en cada diócesis.
Hace ya algunos años, una persona importante dentro del staff eclesiástico de la diócesis de Valencia me dijo de forma medio amenazante que si el arzobispo quería, podía “reducir” a la HOAC. Y tenía toda la razón. Lógicamente, la cosa no pasó de ahí, pero delataba ya una sensibilidad hacia nuestro movimiento. Inversamente, la estrecha vinculación de cualquier movimiento de AACC (que se refleja en los mismos estatutos) con el ministerio pastoral, le dan un carácter singular a la HOAC, como a cualquier otro movimiento de la AACC. Nuestra razón de ser es estrictamente eclesial. Y eso, que a algunos lo sufren como una pesadilla, es precisamente, no solo un privilegio, aunque dicho sea de paso nosotros no somos muy amigos de los privilegios, sino que nos coloca en una situación ventajosa en la relación jerarquía-movimiento, porque supone una relación mutua que nos obliga a ambas partes. Es como una alianza. Y una alianza exige fidelidad por ambas partes. De ahí la permanente exigencia de fidelidad a la Iglesia que han exhibido los buenos militantes que yo he conocido y conozco, incluyendo los consiliarios, de la HOAC. De la exigencia en sentido contrario, no soy yo quién debe hablar.
En concreto, en una visita que hizo el cardenal Pla y Deniel al papa Pío XII, creo que en 1945, éste le sugirió la alta conveniencia, rayana en la necesidad, de erigir un movimiento especializado para el apostolado en el mundo obrero a la vista del desmantelamiento por el régimen político del generalísimo de todo tipo de movimiento obrero organizado e independiente del régimen. El cardenal Pla y Deniel, se tomó el asunto como cosa personal y erigió la HOAC, que se fundó en 1946. O sea hace 75 años. No entro a valorar las intenciones de unos y otros, porque a) las desconozco, y b) yo no soy quién para juzgar intenciones de nadie; eso ya lo hace Nuestro Señor que es bastante más misericordioso que yo.
Lo que vino después ya lo sabemos, y eso ya es parte de nuestra historia. La HOAC, siguiendo las enseñanzas del Evangelio, de la Doctrina Social de la Iglesia (DSI) y del Magisterio en consonancia con lo anterior, que existe un orden de prioridad, tomó partido por los sectores más desfavorecidos de la sociedad, en particular dentro del mundo obrero, que estaba y está en condiciones de precariedad no sólo económica sino en muchos otros aspectos.
Naturalmente, eso produjo muchos conflictos con el régimen instaurado en España bajo el mando del caudillo, con incidencia colateral en nuestras relaciones con el ministerio pastoral, muchos de cuyos miembros se veían, desde la HOAC, demasiado comprometidos con el citado régimen político.
Sin embargo, y a pesar de las duras críticas que se hicieron en tal sentido, y en ambas direcciones, eso no ha supuesto en absoluto ninguna merma en nuestra conciencia eclesial en la mayoría de militantes de la HOAC que interpretamos y dimos sentido no sólo político, sino sobre todo teológico, a tales desencuentros.
En particular, para los militantes de la HOAC, siempre ha sido una materia en constante revisión autocrítica y heterocrítica, siempre bajo la luz del Evangelio y de la DSI, la tendencia impuesta por la cultura dominante a colaborar con un sistema de producción, distribución y consumo, el capitalismo, profundamente lesivo para la dignidad de las personas, y por tanto, fuente de permanente deshumanización. Un sistema que produce muerte en palabras del papa Francisco. De ello puedo dar fe.
Aclarado esa importante y previa cuestión, la vida de la HOAC en Valencia y en general en todo el estado español, ha seguido los avatares sociales y políticos que ha seguido la sociedad en general. También hemos tenido nuestras crisis e incluso nuestras divisiones, las cuales se han intentado salvar de la mejor manera en consonancia de nuevo con el Evangelio y la DSI.
Ha llegado a la HOAC gente joven, muchos de ellos y ellas provenientes de la JOC (Juventud Obrera Cristiana), con nuevas propuestas y nuevas energías y han llegado temas que antes, en los años cincuenta y sesenta, no eran objeto de reflexión y debate, como por ejemplo el feminismo y la ecología. Todo ello ha supuesto un enriquecimiento, por ensanchamiento, de las perspectivas militantes de la HOAC.
En la HOAC se ha producido la convergencia, única por estos lares, de personas de diferente ideología y militancia política. En líneas generales, eso no ha supuesto problemas mayores para la vida y consistencia de la HOAC como organización eclesial, desde el momento en que la propia organización siempre ha animado a sus militantes a participar activamente en las organizaciones populares, sindicales, políticas, etc. Por ejemplo, es un hecho bien conocido y reconocido que en la constitución del sindicato Comisiones Obreras, CCOO, participaron activamente militantes de la HOAC.
Ese tipo de hechos han conducido a mucha gente de Iglesia a decir que la HOAC se había politizado en extremo. Esa forma de pensar tan respetable, como muchas otras, delata para nosotros una falta de conciencia de lo que significa la política en el sentido de la DSI, y una mentalidad claramente conservadora y por tanto favorecedora del estado de cosas actual, que está dominado por la falta de justicia social. En dicho estado de cosas, con un mundo globalizado y sometido a las exigencias mercantiles, hacemos nuestra la reclamación por parte, no solo de los pobres, que es lo nuestro, el lote de nuestra heredad, sino de la misma Iglesia, de la triple T: Tierra, Techo y Trabajo. Aunque en nuestro mundo occidental profundamente contagiado por el régimen del mercado, la reivindicación de la Tierra parece haber desaparecido, debido a la separación entre la persona y su tierra producida por el propio sistema, en lo referente a Techo y Trabajo, nuestra propuesta, que no es sino la de la propia Iglesia, y a la vista de la situación actual, sigue en pie.
Història breu de l’Associació Valenciana de Solidaritat amb Àfrica (I)
L’origen
L’Associació Valenciana de Solidaritat amb Àfrica (AVSA), es constituïx com a associació civil en 2006, amb seu a València, al carrer del Peu de la Creu, núm. 17, als locals de l’Institut Social del Treball, acollits per la proximitat solidària del seu director en Joan Biosca. Allí es reunien setmanalment, amb el sacerdot Jesús Belda, un grup important d’africans subsaharians que estaven deambulant per la ciutat de València, durant més de tres anys, cada dilluns a les 20 h, per a sopar i trobar-se, per a promoure el diàleg entre la creativitat i la necessitat de terra, sostre i treball per als immigrants sense papers; llançant idees i projectes, més enllà de qualsevol assistencialisme.
Cal dir que l’Institut Social del Treball (ISO) és una associació de treballadors cristians promoguda per l’Església catòlica a València que té per finalitat específica la promoció i l’evangelització del món del treball, concretament la difusió, estudi, ensenyament i divulgació de la Doctrina Social de l’Església (DSI), amb obres i paraules, especialment en els seus aspectes de desenvolupament social dels pobles pobres, l’economia justa i el treball digne. Recorde molt bé que el nom de l’Associació va nàixer allí, suggerit per Joan Biosca. En eixa època, amb l’ajuda administrativa i acompanyament d’en Joan Bou, es va impulsar la creació de l’associació AVSA.
L’origen de la motivació per a la creació d’AVSA es troba en la parròquia de la Santíssima Trinitat de Burjassot. Allí va començar, buscant la manera eficaç de desenvolupar la promoció dels africans sense papers residents a la ciutat de València. Tot va nàixer de manera espontània, en Càritas parroquial. Es va atendre quasi «al voleo», amb moviments ràpids. Sense massa organització, sense un control desmesurat... Manava la necessitat d’atendre les persones desprotegides. Es van aconseguir coses. Grans alegries. Comencem a créixer. I vam anar aprenent amb els colps que dona la vida. Una lliçó: és millor equivocar-se acollint, que no fer res i estar-se de braços plegats davant de la necessitat.
Al voltant de l’any 2000, en esta parròquia, un grup compromés de voluntaris (Antonio Pérez, Elena Vermejo, etc.) va promocionar la integració d’un munt de persones, entre les quals es trobaven molts immigrants subsaharians. En la parròquia es van realitzar diverses campanyes d’ajuda als immigrants que es trobaven dormint al vell llit del Túria. Molts dies es recollien aliments per a portar al riu. La germana Inés, religiosa trinitària, i altres seglars sempre van emparar sense titubejos. Però també va haver-hi resistències... Una inquietud anava expandint-se entre nosaltres amb una potència inimaginable.
Un dia de forta pluja, en la furgoneta d’Alfonso Medina, Maria Fuertes ens va dur a la parròquia una tropa de xics perquè els donàrem recer. I després, progressivament, vam anar recollint també un nombre considerable de persones (més de 30!) que van anar sent albergades als locals de dalt de la parròquia. Alguns van ser protegits durant més de tres anys. D’esta època és Steven Boahene, l’africà que sempre va estar
i viu amb la seua família a Xàtiva; fa ja molts anys que va ser contractat per COTASA. Steven sempre va ser una persona molt capaç i un treballador infatigable. Personifica en molts aspectes la integració que AVSA pretén realitzar, amb els pobres i per a les pobres, amb una resposta entregada i activa.
La creativitat sempre va estar present. Calia atendre aquella necessitat. Els immigrants anaven fent acte de presència al barri. Feien falta líders per a conduir-los. Busquem en diversos fronts... A Burjassot es van despertar inquietuds. En aquella època vam tindre la visita i l’ajuda del llavors president de la Diputació de València Fernando Giner. A molts altres cal agrair també proximitat i ajuda. El logotip va ser una creació de l’artista i amic Moisés Díaz. AVSA va començar a caminar legalitzada amb una junta directiva, amb els seus estatuts, amb la perícia de Joan Bou, i amb la necessària organització interna. I han anat sorgint cases d’AVSA: a Penàguila, a Beneixida, a Xàtiva, a Vallada, a Aielo de Malferit. Cadascuna amb les seues històries i relats, i amb la seua autonomia. Estem desenvolupant una associació, amb una burocràcia indispensable, amb procediments senzills, al servici dels qui continuen vivint davall dels ponts del vell llit del Túria, els descartats de la nostra societat.
Penàguila
Des de Burjassot enviàrem un xicotet grup a residir a Penàguila l’any 2003. Allí van ser acollits per Càritas parroquial, amb Sergio Gisbert i Mari Carmen Blanes, amb força i amb il·lusió. Van llogar una casa en el nucli urbà durant un temps. Tot resultava costós, difícil i complicat. Penàguila és un municipi menut de la Comunitat Valenciana, situat al nord de la província d’Alacant, a la comarca de la Foia d’Alcoi. Allí es van integrar diversos membres africans d’AVSA, amb el treball domèstic. I altres feien activitats agrícoles als pobles veïns d’Alcoleja, Benasau i Benifallim. Este projecte, per circumstàncies diverses que el van limitar, va durar aproximadament tres anys. Gratitud històrica als esforços heroics del món rural!
Beneixida
A la casa abadia de Beneixida van estar albergats durant diversos anys un grup d’uns deu que van tirar avant. Allí es va crear una xarxa de voluntaris actius: d’Alcàntera (Xelo, Rafael Solves, Josefa... i moltes altres dones), Beneixida (Yolanda Pérez, Vicent Roig), Cotes (Marisa) i Càrcer (Enric Bono). Són molts els que van col·laborar, i de diverses maneres. La llista seria extensa. En la parròquia d’Alcàntera de Xúquer i de Beneixida cada dilluns al matí de manera popular es recollien els entrepans i alguns donatius setmanals per als africans. Va ser entre
La creativitat sempre va estar present. Calia atendre aquella necessitat. Els immigrants anaven fent acte de presència 2009 i 2017, quan els africans treballaven al poble i la redor. Després d’esta data el grup s’ha anat reduint de manera progressiva fins al tancament definitiu de la vivenda. No és just que les cases abadies estiguen tancades mentre hi haja persones dormint al carrer. El fenomen migratori no durarà solament un o dos anys i no podem quedar-nos indiferents ni callats. ¿Es tornarà a agafar la torxa a Beneixida? El papa Francesc concreta el seu missatge fraternal demanant a les parròquies que acullen els immigrants.
València
A primers de març del 2019 comencem el projecte d’AVSA a València amb el Pati de la Solidaritat, juntament amb Càritas parroquial de Sant Josep Artesà. Vam anar realitzant uns quants sopars mensuals, en un ambient bonic, festiu i solidari. Una trobada amb el món de la cultura en cada convocatòria, amb una pregària interreligiosa que té presents les situacions doloroses del nostre món. La cançó més famosa del cantautor Jaume Sisa definia la nostra disposició: «Oh, benvinguts, passeu, passeu, de les tristors en farem fum, la casa meua és casa vostra si és que hi ha cases d’algú». Suspenem les trobades en començar la pandèmia. I, al mateix temps, davant la greu necessitat, en març de 2020, comencem el projecte d’allotjar deu subsaharians en un local que la parròquia ha anat habilitant a poc a poc per a tal fi. Un projecte de Càritas que juntament amb AVSA estem vivint cada dia de forma feliçment interrelacionada en el Pati de la Solidaritat. Els nostres «Amics del Carrer» (és el nom d’una associació) ens han ensenyat a obrir les portes més que a tancar-les, a ser hospitalaris en les perifèries socials i existencials.
Vallada
El projecte Granja de l’Ombria - Pinar dels Sants - Catedral de la Natura de Vallada va iniciar la seua marxa en el 2012. I al llarg dels anys s’ha desenvolupat un projecte de promoció per a un grup d’immigrants subsaharians. Molts? Pocs? Recentment s’ha fet una llista global de les persones concretes que s’han atés de manera ininterrompuda, i no sobrepassen el centenar. Ens importa més el valor simbòlic que les grans quantitats. Ens recolzem en els gestos: la paella de tots, el primer diumenge de cada mes; la visita de la Creu de Lampedusa, beneïda pel papa Francesc; la imatge de la Mare de Déu dels Rebutjats en una Catedral de la Natura feta pels descartats i amb materials d’un sol ús, etc. Assumim els desafiaments actuals en l’àmbit social i ecològic. A contracorrent: dialogant, resant, compartint.
Tot va començar un any abans. Amb la idea de continuar donant recer a un xicotet grup d’immigrants subsaharians, AVSA va llogar una vivenda a Vallada. Va arribar un moment en què amb Ángel Garrido ens vam proposar aconseguir un allotjament que evitara el pagament del lloguer. La idea es va materialitzar al cap de poc. I a l´Ombria van anar a viure els quatre immigrants que es trobaven al pis del poble.
Moltes efemèrides caldria recordar per a donar compte del viscut durant tots estos anys, en els quals s’ha albergat un grup amb una relació amistosa i fraterna. L’esdeveniment més trist que hem viscut va ser la mort en 2012 de Josep Diouf, després d’haver-li diagnosticat una tuberculosi emmascarada. Acompanyàrem el cadàver al Senegal, amb la seua família... Actualment viuen 26 persones de manera permanent.
Una cosa bella: la participació de la Fundació Javier Simón en AVSA Vallada al voltant del 2014. Amb ells hem compartit molt, tot, quasi tot: pregària mensual, participació de voluntaris, ajuda econòmica, fraternitat i amistat. Farien falta molts fulls per a poder desgranar noms i activitats. El nostre reconeiximent i gratitud a Maite Pérez Fayos i amics d’Anna.
Un altre fet a destacar: haver conegut l’any 2015 la cooperativa Okambuva, empresa de bioconstrucció, execució d’obra, formació professional, recerca i desenvolupament de materials i tècniques de bioconstrucció. Gratitud a Alejandro López, soci fundador, arquitecte i dissenyador, constructor amb palla i terra; i també a tot el seu equip.
Una altra persona que ens ha ajudat sempre amb la seua perícia ha sigut el constructor David Juan Hernández, natural de Càrcer. Amb ell sempre hem pogut comptar per a resoldre qual sevol dificultat arquitectònica i per a desbloquejar problemes de l’obra que ens resultaven complexos.
El fet més bell del projecte sempre ha sigut l’acostament de persones voluntàries i institucions: el contacte amb la parròquia de Vallada; el concert anual dels amics de Sedajazz; la visita de l’Ajuntament del poble; la col·laboració del CEPAIM. Les persones voluntàries que han contractat generosament mereixen reconeiximent sublim i elogi solidari. I també cal dir un «molt bé» a la participació excel·lentment fructífera dels mestres vinguts des d’Aielo de Malferit: Empar Colomer Gandia, Francesc Martí Barber i altres més.
El mes de novembre de l’any 2016 el projecte va ser visitat per l’arquebisbe de València Antonio Cañizares, per a beneir el primer monument de la península dedicat a la Laudato si’. I des del paradigma d’esta encíclica del papa Francesc s’ha desenvolupat el projecte; amb el significat diocesà que este gest comportava. Al llarg dels anys hem pretés convidar els sacerdots dels diversos arxiprestats perquè el projecte se senta significatiu diocesanament parlant i, al mateix temps, poder obtindre suports diversos. Càritas diocesana en els anys recents ha estat més prop del projecte; la nostra proposta és que siga assumit per esta institució com una Fundació Laudato si’ - Fratelli tutti, al servici de la humanització. Hem fet algunes coses, però l’activitat principal ha sigut –i continua sent– l’atenció de la gent més desprotegida, a la Casa Comuna.
La nostra societat està enfrontant una crisi seriosa de refugiats i immigrants i la magnitud del problema és gran. Tenim enormes desafiaments i moltes necessitats. Ens han motivat sempre les persones que se senten abandonades a la ciutat de València: sense casa, sense conéixer ningú, sense treball, sense papers, necessitats d’ajuda. Veem els seus rostres i escoltem les seues històries, i tractem de respondre a la seua situació. I és tan poc el que podem fer! Pretenem que se senten volguts i una mica més protegits.
Recentment AVSA ha contractat Nacho Alós Matarredona, educador social, perquè progressivament puga dedicar-se al projecte. El nostre propòsit és que es duguen a terme aquelles millores i innovacions que, per circumstàncies diverses, s’han posposat. El repte és dur a terme cada vegada amb més vigor un projecte sostenible, en adultesa, en evolució, en interacció amb el mitjà; tal vegada amb menys esforços i amb majors resultats. El nostre projecte és únic, però també hem de ser conscients que és fràgil i vulnerable, i que tot es pot trencar amb extrema facilitat. Cal desenvolupar l’escolta: escoltar les necessitats i expectatives de cada participant.
A poc a poc estem desenvolupant una aspiració humana a favor dels sense papers. Una llar en la qual puguen iniciar un camí que els porte a fer realitat els seus somnis i aspiracions. I amb dificultats es va aconseguint, cada any, a poc a poc, la integració d’un xicotet grup de persones. De 20 a 25, més o menys. Gratitud a tots els que ens ajuden per a poder afrontar esta realitat, condicionada per l’actual llei d’estrangeria. Gratitud a Càritas diocesana. Persona a persona, desenvolupant capacitats, amb responsabilitat. Esta és la nostra manera de canviar el món. Gràcies!
Xàtiva
La història d’AVSA a Xàtiva, per les seues característiques, mereix un tractament singular que han de fer els responsables del projecte sota la coordinació d’en Joan Bou. Ressenyem alguns aspectes significatius que cal desenvolupar.
1. La seu d’AVSA es va traslladar a Xàtiva en 2015, al carrer Teresa Jornet, núm. 8. Esta casa va ser donada a l’Associació, i allí residix un grup d’immigrants. Posteriorment s’han obert dos cases més a la ciutat.
2. Es crea COTASA, una cooperativa de treball creada a l’empara d’AVSA, per a facilitar la inserció social i laboral de persones immigrants que treballen per la seua promoció integral. Volem construir un projecte solidari de convivència intercultural, interracial, interreligiosa... Apostem pel comerç just, el consum responsable, els valors ecològics i la qualitat en el nostre treball. Distribuïm productes solidaris de la terra que nosaltres cultivem o adquirim de xicotets productors, i així ajudem a recuperar l’agricultura tradicional i la producció artesana.
3. S’elegix com a president de l’associació el senyor Antoni Mira, que és corresponsable del projecte d’AVSA a Xàtiva.
Història d’un despropòsit
No pretenc descobrir a ningú de vosaltres la importància de l’habitatge i el treball en la construcció de societats inclusives. El problema de l’habitatge en el món és el primer senyal de l’exclusió, allò que separa els ciutadans del primer món dels del tercer i quart és el lloc que habiten. Històricament l’habitatge es contempla com un element essencial de la dignitat de la persona, si no més que el menjar. Es pot passar gana, però viure al carrer o quedar-se al carrer és passar de la pobresa a la misèria.
A Espanya este problema és endèmic. El problema de l’habitatge és producte de la tensió entre el dret humà a un habitatge digne i l’objecte de mercat que ocupa un lloc preferent com a motor de l’economia espanyola. Les dictadures sempre han recorregut a la construcció per a resoldre els problemes econòmics. El programa de cases barates de la dictadura de Primo de Ribera i renovada pel règim de Franco, centrada en la producció d’habitatges en règim de propietat, aconseguí tres efectes importants: resolgué momentàniament el problema d’habitatges en zones de desenvolupament, desenvolupà un proletariat amb mentalitat de propietari i afavorí un negoci especulatiu de grans beneficis per als empresaris més afectes al règim, alhora que generava un nombre important de llocs de treball.
Influïda per una interpretació interessada de la DSI i per la necessitat de donar una imatge internacional de construcció de l’estat de benestar, el règim afavorí la construcció de grans barriades per a pobres. Mentre algunes d’elles arribaren a nivells d’inclusió bastant acceptables, gràcies principalment a la conscienciació i lluita obrera d’organitzacions com ara l’HOAC i altres organitzacions religioses i laiques compromeses amb el desenvolupament de la gent; algunes altres quedaren per a sempre marcades com a guetos de delinqüència i marginalitat. Els habitants d’allò que hui s’anomenen barris d’acció preferent (BAP) carreguen amb el senyal de la marginació a l’hora d’accedir al mercat laboral.
La construcció també ha sigut motor de l’economia de l’Espanya democràtica. La necessitat d’actualització de les infraestructures, els grans esdeveniments i les inversions arribades d’Europa desenvoluparen una potentíssima indústria de la construcció i la promoció d’habitatges que esdevingué en una bombolla immobiliària especulativa d’excessives dimensions. La fallida dels anys 2007-2008 va canviar radicalment el panorama, va ser el turisme l’encarregat de tirar endavant i amb ell arribà una activitat de transformació d’habitatges en lloguers més especulatius. Esta gran crisi va produir la pèrdua de milers d’habitatges, producte del desnonament i del malbaratament de vivendes de la gent més pobra, que passaren a engrossir la cartera de fons d’inversió de dubtosa ètica. La conseqüència és que a les grans ciutats l’escassetat d’habitatges i el lloguer prohibitiu estan augmentant la vulnerabilitat dels més pobres, en especial dels jóvens i de les dones.
La pandèmia de la COVID-19 encara ha empitjorat la situació, augment de persones en l’atur, treballadors pobres que per primera vegada han hagut de recórrer a la beneficència... En Novaterra detectem amb gran preocupació que per a la integració de la gent, en especial dels jóvens i de les dones, no basta tindre un treball estable, és necessari també tindre accés a un habitatge mínimament digne i amb facilitat de connexió amb els centres de treball i formació.
En els últims 100 anys, Espanya ha passat de ser rural a ser urbana, en eixe procés han aparegut borses de pobresa i barraquisme al voltant de les grans ciutats que, en alguns casos, han quedat integrats; en altres, per desgràcia, es transformaren en guetos. En estos moments, la infravivenda la tenim instal·lada al si d’estes ciutats, on la gent viu en llocs que són autèntiques rateres inhumanes.
Terra, sostre i treball
Esta realitat provoca seriosos dubtes sobre la qualitat democràtica de la nostra societat. Les desigualtats són cada vegada més grans i amenacen amb la creació de borses d’exclusió i misèria enquistades en les grans ciutats.
Cal recordar que treball i habitatge són drets constitucionals. La política ha d’arbitrar i facilitar les mesures adequades per a resoldre el problema d’allotjament i treball. Només una política activa que lligue el treball i l’habitatge de manera homogènia en un territori i que comprometa tota la societat pot ser una via de solució del problema de l’exclusió.
Segons el Nobel Amartya Sen, la societat serà més justa i més lliure si facilita de manera igual que els ciutadans i les ciutadanes puguen desenvolupar les seues capacitats tant com vulguen. Entre les capacitats principals, el treball digne, la capacitat de disposar de medis per a vestir-se y tindre allotjament, o la capacitat de participar en la vida social de la comunitat són imprescindibles per al desenvolupament humà.
El papa Joan Pau II, fent-se ressò de la DSI recordava que “Tota persona té dret a un nivell de vida adequat que li assegure, així com a la seua família, la salut i el benestar, i en especial l’alimentació, el vestit, la vivenda, l’assistència mèdica i els serveis socials necessaris” i no val l’excusa que això correspon a la política, els cristians i la societat civil en general hi estem obligats a participar en la solució del problema.
El papa Francesc, concreta més i presenta la seua proposta de: Terra, Sostre i Treball (TST) dirigit a tota la societat mundial, a cadascú segons la seua responsabilitat política, però els catòlics, amb major motiu, no podem defugir esta crida.
Podríem dir que TST lliga territori, és a dir, urbanisme i planificació econòmica sostenible, amb treball digne i emancipador, i allotjament inclusiu adequat a les necessitats de la societat on està incardinat.
Una societat civil compromesa
Hi ha realitats de gent sense sostre de difícil integració per la via del treball. Darrere d’estes persones hi ha històries complexes de renúncia a la socialització. Algunes organitzacions com ara els germans de Sant Joan de Déu, Villa Teresita i altres, fa anys que intenten pal·liar estes situacions. D’altra banda, hi ha col·lectius en què la precarietat comença per la necessitat de gaudir d’un allotjament digne, de tal manera que si no tens un domicili «normalitzat» és ben difícil que una empresa et contracte.
Esta relació, que com un cercle viciós lliga treball, allotjament i territori, marca l’agenda política i de la societat civil en molts països del nostre entorn socioeconòmic. Per exemple, en la part central de Viena un elevat percentatge d’habitants viu en cases de lloguer, més del 30% de propietat pública. La gestió pública -privada facilita la relació entre propietaris i llogaters, de tal manera, que gran part dels habitants no es plantegen l’adquisició d’habitatges. A Nova York, també funciona la relació pública-privada, més de 48 mesures faciliten l’accés a l’habitatge en forma de lloguer, la qual cosa facilita molt la gran mobilitat que té esta ciutat. Al Regne Unit, també s’han desenvolupat programes que lliguen treball i allotjament, un d’estos programes Housing First, primer l’allotjament, ha aconseguit millorar la inclusió dels col·lectius més desfavorits gràcies al trencament del cercle per la part de l’habitatge.
A Espanya, els nostres polítics estan capficats en una lluita interna per resoldre el problema de l’habitatge des de propostes d’efectivitat més que dubtosa. A casa nostra, l’intent d’aconseguir habitatge públic mitjançant el dret d’adquisició preferent va en la bona direcció, però està abocat al fracàs si no és capaç de comptar amb la participació de la societat civil. L’administració és lenta i manca dels recursos necessaris per a adquirir i sobretot per a gestionar un parc d’habitatges públic de lloguer.
Algunes persones i organitzacions amb sensibilitat han compromés el seu temps i fins i tot les seues propietats per a ajudar algunes persones a eixir del cercle de l’exclusió. En Novaterra fa algun temps que observem els problemes que genera la manca d’allotjament adequat. Per això, hem assajat algunes iniciatives: amb col·laboració amb l’ajuntament de València i l’orde franciscà atenguérem un col·lectiu de sense sostre durant el confinament de l’inici de la pandèmia. En poc de temps, almenys 4 persones s’interessaren a seguir alguna via d’inserció. En col·laboració amb Caixabank hem desenvolupat el projecte «Vivienda y Trabajo a la vez», que ha permés l’allotjament de 19 persones, de les quals 8 han aconseguit una ocupació digna. Hem creat un grup de treball, «La vivenda un dret», amb persones i col·lectius que ja estaven treballant en esta línia, per a estudiar i posar en marxa un projecte de major envergadura: «Vivienda Amiga».
«Vivienda Amiga» intenta arreplegar el millor de les experiències foranes per a proporcionar un allotjament digne, encara que siga compartit, a persones que estiguen en disposició de treballar i de col·laborar en la bona marxa del projecte. Comencem amb els habitatges de les experiències que ja estan funcionant, a partir d’ací es tracta d’ampliar el nombre d’allotjaments al nostre abast. Els propietaris sensibilitzats posarien, de manera temporal i per un preu solidari, els seus immobles a la nostra disposició a fi que nosaltres els gestionàrem inspirant-nos en el projecte del Housing first esmentat.
Som conscients de la limitació del tercer sector per a enllestir projectes d’esta grandària, necessitem el suport de l’administració. Per això, la cooperació pública-privada és imprescindible. L’ideal seria generar agències comarcals o intercomarcals d’allotjament social que feren la triple tasca de: procurar i gestionar els immobles, com si es tractara d’una agència immobiliària; administrar els béns posats en mans de l’agència; i procurar l’animació social necessària per a garantir el bon ús dels habitatges i facilitar la col·locació dels usuaris.
Hi ha molt per fer, hi ha habitatges vells fruit d’herències, propietats antigues d’institucions, com ara les cases abadia de moltes parròquies que romanen buides i altres propietats en mans de la banca i de l’administració que només generen maldecaps als propietaris. La banca també podria tornar a la societat el favor del rescat passat, retornant immobles a preus no especulatius. Una bona gestió podria traure profit d’eixe parc immobiliari que ara roman inactiu, ficaria més habitatges en la borsa de lloguer facilitant el descens del preu en la zona, podrien ser una solució per a revitalitzar pobles de la València o l’Espanya buidada i alhora tindrien un ús social que facilitaria la inserció de persones vulnerables.
En el nostre encontre amb el senyor alcalde Joan Ribó del dia 17 de març li manifestem el desig d’ajudar a resoldre el problema de la vivenda per a alguns dels immigrants sense papers acollits en la parròquia, mitjançant la construcció d’un parc de vivendes públiques cent per cent de bioconstrucció amb la professionalitat d’Okambuwa i amb la participació dels mateixos immigrants. Per a la gestió d’este parc públic de lloguer li vam oferir la col·laboració d’AVSA-COTASA. No estem pensant en el paradigma de guetos per a integrar els immigrants. La proposta va en la línia de la integració pluriracial.
Una proposta educativa per a la ciutat de València que tal vegada es podria realitzar en la demarcació de les Alqueries de la Ciutat de l’Artista Faller. Una iniciativa l’objectiu de la qual hauria de ser educar xiquets i jóvens, amb tallers realitzats per experts en bioconstrucció.
Altres ciutats en el món es presenten com a davanteres en esta mena de realitzacions, finançant projectes de bioconstrucció que puguen servir a una nova manera de situar-se en la llar.
No oferim ací un projecte d’arquitectura per a contemplar però per a no habitar, sinó exemples honestos d’innovació, ús de materials, edificis per a viure i al servici de les persones a les quals van dirigits.
Una idea per a implicar empreses constructores valencianes especialitzades en l’ús de materials i tècniques naturals per a l’edificació.
Un projecte creatiu per a oferir formació a través de cursos, tallers i esdeveniments al voltant de la bioconstrucció, fomentant la investigació i el desenvolupament de nous productes, mitjançant l’experimentació i recuperació de materials, tècniques i oficis de la construcció tradicional i natural.
Una iniciativa per a realitzar servicis, amb una manera de participar de l’economia existent responent al respecte i l’intercanvi just entre les persones i amb l’entorn.
Okambuwa executa obres en bioconstrucció, respectant els principis de la construcció sana i sostenible. Es tracta d’una cooperativa especialitzada en construcció amb fardells de palla, estructures de fusta, tècniques de construcció amb terra crua, rehabilitacions energètiques i revestiments amb morters d’argila i calç, incloent-hi els acabats decoratius com el tadelakt i altres estucs de calç, esgrafiats i pintures transpirables.
En Okambuwa s’elaboren mòduls prefabricats de palla i fusta, aptes com a murs estructurals aïllants per a la bioconstrucció.
COTASA és una Cooperativa de Treball Solidari amb Àfrica COOP. V. Naix en 2014 sota l’empara de l’Associació Valenciana de Solidaritat amb Àfrica (AVSA), l’objectiu prioritari de la qual és l’atenció a immigrants subsaharians a través d’un projecte solidari de convivència intercultural.
Sumant esforços i amb voluntat creativa, amb els immigrants sense papers com a protagonistes, es podria desenvolupar una invenció d’estes característiques, al servici educatiu de la bioconstrucció, en jóvens i adolescents, a la ciutat de València.